"El petróleo algún día se va a terminar, no hay que alarmarse, pero es una realidad. Lo importante es comenzar a investigar la posibilidad de explotar energías alternativas”, explicó Nora Nichio, profesora de la Universidad Nacional de La Plata.
En el marco de las primeras Jornadas de Investigación y Transferencia de la Facultad de Ingeniería, la directora del proyecto de investigación para la producción de hidrógeno a partir de glicerina, la doctora Nichio contó al diario “Hoy” el grado de avance en la investigación de su grupo de trabajo.
Los combustibles derivados del petróleo siguen planteando dificultades por la emisión de dióxido de carbono y gases contaminantes a la atmósfera y, sumado a esto, la disminución de reservas y la existencia finita de estos combustibles. Es en este sentido que “la búsqueda de fuentes alternativas de energía es una tarea que los investigadores tenemos como desafío”, explicó Nichio.
Las energías renovables como la solar, la eólica, la geotérmica y la mareomotriz tienen un carácter inagotable; sin embargo, presentan la dificultad de su almacenamiento y transporte.
 
Vector energético
El hidrógeno, por su parte, aparece como verdadero vector energético, debido a que almacena una mayor cantidad de energía por unidad de peso, produciendo agua como producto de combustión. Aunque si bien el hidrógeno es un elemento abundante en todo el planeta, no aparece libre en la naturaleza.
Debido a esto, el grupo de investigación que dirige Nichio desarrolla catalizadores para producir hidrógeno a partir de glicerina. “Elegimos la glicerina por dos cuestiones: en primer lugar, se debe a que en la actualidad es un importante subproducto de la producción de biodiesel que, como no tiene un destino comercial fuerte, tiene un bajo valor de mercado; y por otra parte, Argentina tiene gran disponibilidad de glicerina, debido a las grandes producciones de este combustible derivado de la soja.
Otra de las ventajas que presenta el hidrógeno responde a que es fácilmente transportable por tuberías y puede convertirse en energía, ya sea por quemado directo (energía calórica), por explosión en un motor a combustión interna (energía mecánica), o por reacciones electroquímicas a través de una celda de combustible (energía eléctrica). El resultado de esa combustión no es más que agua o vapor de agua. En el día de hoy concluyen las jornadas, que contaron con una numerosa asistencia. Marcos Actis, decano de la Facultad de Ingeniería, remarcó el carácter positivo de estas charlas, porque permiten mostrar lo que está haciendo esta unidad académica.
 
Fuente: diario Hoy, de La Plata