A diferencia de los inviernos anteriores, esta vez la llegada del frío no vino acompañada- hasta ahora- de cortes y restricciones en los suministros de energía eléctrica y gas. Pero, lejos de sustentarse en un incremento de la generación y la extracción de gas, la relativa mejora en el abastecimiento responde a dos motivos salientes: el parate de la actividad industrial y el descenso del consumo interno.
De acuerdo con los datos que barajan los técnicos energéticos, la demanda industrial de gas acumularía en lo que va del año una caída del 4 y 5% respecto a 2008. En en caso del servicio eléctrico, el consumo de los grandes industrias arrastra en los primeros cinco meses un baja promedio del 4% versus similar período de 2008. Ambos datos están en línea con el índice de producción industrial (IPI) que elabora FIEL y cuya última medición mostró entre enero y mayo una caída del 12,6% respecto a igual período de 2008. Junto con el impacto de la crisis económica, otro factor que ayudó a despejar la posibilidad de cortes fue la tardía aparición que tuvo el invierno este año.
 En 2007 y 2008, la ola de frío había arrancado a mediados de mayo, lo cual obligó a poner en marcha una serie de restricciones que se prolongaron durante varias semanas. En el caso del sector gasífero, la mayor demanda residencial de esta semana se pudo abastecer con la producción local y la inyección a pleno del buque regasificador que está anclado en Bahía Blanca y despacha un promedio 8 millones de metros cúbicos diarios. Las estaciones de GNC -que junto con los grandes industrias y las usinas están en los primeros lugares a la hora de la restricciones iniciales del servicio- no han tenido hasta ahora ninguna clase de recortes. Y según los diagramas operativos de las distribuidoras, esa situación de normalidad se mantendrá en los próximos días por más que persistan las bajas temperaturas.
 La única "discontinuidad gasífera" se dio ayer en interior bonaerense con dos recortes aplicados en contratos "interrumpibles" de una cementera y una refinería de la provincia. Por el lado del servicio eléctrico, la suba del consumo que trajo el frío no llegó a superar el récord de demanda a nivel nacional del invierno pasado de 19.126 MW. En el caso de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, si bien hubo nuevo pico histórico de potencia de 7.635 MW el miércoles, ayer la demanda bajó casi 300 MW y volvió a ubicarse en los niveles de los últimos días.

En 2007 y 2008 hubo fuertes restricciones energéticas. Este año, hay factores que inciden en un descenso del consumo.