El balance del Programa de Uso Racional de la Energía Eléctrica (Puree) del bimestre pasado volvió a probar que los usuarios que más consumen no recortaron sus gastos, pese a los castigos, y reflejó el impacto de la crisis económica.
Según la resolución 365, publicada ayer en el Boletín Oficial, que detalla los ciclos de facturación con fechas de cierre entre el 10 de marzo y el 9 de junio pasados, del total de la base de usuarios de Edenor, Edelap y Edesur unos 737.284 recortaron sus consumos, mientras que 1.377.556 se excedieron y quedaron expuestos a las penalizaciones.
En el caso de los usuarios residenciales con consumos superiores a 300 kW/h, que son los que están alcanzados por el régimen, el excedente se convirtió en multas por 16,2 millones de pesos. Las compensaciones, que sólo son recibidas por los residenciales con consumos menores a 1000 kW/h, sumaron $ 1,6 millones.
"Es evidente que la gente que recibió los castigos es indiferente al alza de precios, lo que muestra que el régimen no está surtiendo efecto en sensibilizar al público sobre el uso de la energía", analizó Daniel Montamat, ex secretario de Energía y director de la consultora especializada Montamat & Asociados.
De acuerdo con los balances presentados por cada distribuidora, detallados en la resolución, la única categoría que mostró ahorros reales fue la G1, que contempla a los pequeños comercios, como panaderías y locales de indumentaria.
Los datos duros muestran que estos usuarios ahorraron 38.329 megavatios y se excedieron en 21.452, cifra que arroja un ahorro neto de 16.877 MW/h.
Según la resolución 365, publicada ayer en el Boletín Oficial, que detalla los ciclos de facturación con fechas de cierre entre el 10 de marzo y el 9 de junio pasados, del total de la base de usuarios de Edenor, Edelap y Edesur unos 737.284 recortaron sus consumos, mientras que 1.377.556 se excedieron y quedaron expuestos a las penalizaciones.
En el caso de los usuarios residenciales con consumos superiores a 300 kW/h, que son los que están alcanzados por el régimen, el excedente se convirtió en multas por 16,2 millones de pesos. Las compensaciones, que sólo son recibidas por los residenciales con consumos menores a 1000 kW/h, sumaron $ 1,6 millones.
"Es evidente que la gente que recibió los castigos es indiferente al alza de precios, lo que muestra que el régimen no está surtiendo efecto en sensibilizar al público sobre el uso de la energía", analizó Daniel Montamat, ex secretario de Energía y director de la consultora especializada Montamat & Asociados.
De acuerdo con los balances presentados por cada distribuidora, detallados en la resolución, la única categoría que mostró ahorros reales fue la G1, que contempla a los pequeños comercios, como panaderías y locales de indumentaria.
Los datos duros muestran que estos usuarios ahorraron 38.329 megavatios y se excedieron en 21.452, cifra que arroja un ahorro neto de 16.877 MW/h.
Fuente: “La Nación”
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