El proyecto se trata de la instalación de una caldera de biomasa, para la cual la compañía realizó una inversión de alrededor de u$s 4 millones, y la decisión de comenzar a desarrollar energía renovable. "El principal objetivo consiste en reaprovechar los residuos de madera propios originados en el proceso productivo para la generación de vapor y la disminución del 100% de disposición de los mismos", destacó la compañía a través de un comunicado.

 
El proyecto se emplaza en la planta ubicada en la localidad de Ramallo, sobre el Río Paraná, al norte de la provincia de Buenos Aires. Allí, produce más de 700 toneladas mensuales de residuo industrial a partir de la madera, su principal insumo de fabricación, con lo que a partir de la producción de energía renovable buscará reducir el consumo energético de matriz gasífera, además de generar mejoras hacia el medio ambiente.
 
El proyecto de biomasa estima una generación de alrededor de 20 toneladas de vapor a partir de la utilización del recurso renovable (se agrega, además de la caldera, un patio generador de chips o preparador de biomasa, con silos y tecnología de última generación). "Este proyecto reducirá significativamente el impacto ambiental de la planta industrial, eliminando la generación de desperdicio, reduciendo además el consumo de gas en un 50%, siendo este último un recurso no renovable", proyectó la empresa.
 
La compañía, con 70 años de trayectoria en la industria maderera local, forma parte del Grupo Ferrum FV, quien controla el 45% de las acciones de la empresa, en una compañía que cuenta con una facturación de alrededor de $ 400 millones al año y da trabajo a alrededor de 300 personas en el país.
 
Desde el año pasado, encara un proceso de reconversión para llegar al consumidor final con la distinta variedad de sus productos (actualmente sus clientes principalmente se mueven entre industrias y corporaciones), además de la renovación de materiales, diseños conceptuales y nuevas líneas de muebles y tableros. Para esto, la compañía desarrolló un plan al 2020, que prevé una inversión estimada entre $ 140 a $ 150 millones.
 
Fuente: El Cronista